El estrés laboral en época de selfies

Las selfies, esas fotos de nosotros mismos que nos tomamos para divulgar en nuestras redes sociales plantean un aspecto que es importante profundizar. Si estas acciones comienzan a repetirse de manera constante y compulsiva, podríamos incluirlas en una especie de enfermedad llamada algo así como “Selfitis”. Esto lo como indica un estudio publicado en la International Journal of Mental Health and Addiction, aclarando que nuestras acciones en tal sentido pueden indicar una manera de compensar la falta de autoestima.

A su vez, el estrés laboral se encuentra definido por la Organización Mundial de la Salud como aquel que afecta negativamente a la salud psicológica y física de los trabajadores, y que no impacta solo a las personas, sino también a la eficacia de las entidades para las cuales esas personas trabajan. A través del tiempo se lo ha denominado de diversas formas: agotamiento o ‘burn out’, surmenage. En muchos aspectos se parece a la depresión, pero es fundamental destacar que son dos estados diferentes.

Sin lugar a dudas la autoestima y estrés constituyen dos problemas que frecuentemente van unidos y que además se retroalimentan.

Su combinación produce trastornos psíquicos que a la larga se pueden trasladar a la salud física. Con respecto a la autoestima, la escasa valoración de uno mismo influye en el estrés y, por tanto, en el peor de los casos, en el riesgo de padecer depresión.

Además ser importante para cada persona, una adecuada autoestima de los empleados es una condición necesaria para cumplir los objetivos de una compañía.  Lo que las personas sientan sobre sí mismas, puede verse afectada por una incorrecta gestión del área de RRHH. Si en cambio se busca crear espacios para fomentar una adecuada autoestima,  tanto la productividad, como la creatividad y la gestión de los cambios van a verse impactadas positivamente

Es evidente que la combinación de baja autoestima y estrés puede ser una algo peligrosa, pues la baja autoestima implica falta de respeto y amor hacia nosotros mismos, es allí donde el estrés puede tener un mayor impacto.

Como menciona Branden, quien ha dedicado años para desarrollar investigaciones en la temática:

«De todos los juicios que formulamos en la vida, no hay ninguno tan importante como el que formulamos sobre nosotros mismos»

¿Qué podemos hacer desde RRHH?

Ya hemos hablado bastante de lo importante de fomentar, implementar y evaluar acciones que impulsen el balance trabajo y vida personal y la felicidad en el trabajo.

En ese sentido, podemos mencionar algunas acciones que consideramos imprescindibles a los fines de procurar dicho balance, y que al mismo tiempo evitan el estrés de la vida laboral actual que imprime el mundo que vivimos.

 

¿Cómo podremos reconocer los signos del estrés laboral?

Los principales signos de alerta pueden ser los mencionados en el siguiente cuadro

Algunas ideas para la concientización en las organizaciones

Para evitar alertarnos cuando los síntomas de estrés ya están presentes, es importante la generación de espacios de comunicación relacionados con el cuidado personal, el descanso, el ejercicio y la correcta nutrición.

 

Es importante mencionar que el estrés es generalmente una reacción ante una amenaza potencial. Esa reacción nos debería preparar para escapar de la situación que está provocando esa amenaza. En el ámbito laboral, todos los comportamientos pueden potenciarse o agravarse por cuestiones personales. Las personalidades maduras tienen una variedad de recursos con la que pueden hacer frente mucho mejor al estrés sostenido con menores consecuencias. Esa capacidad de resiliencia bien desarrollada nos ayudará a afrontar las situaciones difíciles, saliendo incluso fortalecidos de las mismas.

Las personas pueden estar expuestas al mismo nivel de estrés, pero sin embargo responden de mejor manera e incluso logran obtener aprendizajes si son resilientes.

Si las situaciones de estrés se mantienen en el tiempo es cuando surgen otro tipo de complicaciones, tales como somatizaciones, síntomas gastrointestinales –gastritis o descomposturas-, síntomas musculares -dolores y contracturas- y malestares de cabeza. Ellos serán los síntomas de que debimos actuar antes y que, en ese sentido, ya debemos encauzar los problemas a nuestro médico de cabecera.

Al igual que en todos los espacios en los cuales transcurre nuestra vida: casa, familia, amigos, en el ámbito laboral también hay vínculos que pueden favorecer a que el clima sea de cordialidad y camaradería. Debemos buscar, entonces la mejor forma de favorecerlas.

Ideas finales para reflexionar y trabajar para prevenir el estrés laboral: